¿Porqué viajar?

“Dentro de veinte años estarás más decepcionado de las cosas que no hiciste que de las que hiciste. Así que desata amarras y navega alejándote de los puertos conocidos. Aprovecha los vientos alisios en tus velas. Explora. Sueña. Descubre”. – Mark Twain

Son muchos los autores que han escrito sobre los viajeros. Aquí van algunos ejemplos.

“El mundo es un libro y aquellos que no viajan solo leen una página”. – San Agustín

“Vivimos en un mundo maravilloso que está lleno de belleza, encanto y aventura. No hay un límite para las aventuras que podemos tener siempre y cuando las busquemos con los ojos bien abiertos”. – Jawaharial Nehru

“No sigas el sendero. Dirígete en cambio a donde no hay sendero y deja una huella”. – Ralph Waldo Emerson

“Una vez que has viajado, la travesía nunca termina, sino que es recreada una y otra vez a partir de vitrinas con recuerdos. La mente nunca puede desprenderse del viaje”. – Pat Conroy

“Viajar y cambiar de lugar revitaliza la mente”. – Seneca

Para mi, viajar es pasarla bien, utilizar mi tiempo haciendo cosas que me sorprendan.

Me gusta interactuar con la naturaleza con una máquina de fotos o una caña de mosca, o simplemente sentarme y contemplar lugares nuevos, desconocidos, fascinantes.

Prefiero conocer la Torre Eiffel o las Pirámides de Egipto en directo, no a través de una representación hecha en Las Vegas, por mejor que ésta sea.

Me gusta conocer gente y culturas diferentes conocer las maravillas del mundo en primera persona, con los cinco sentidos.

Caminar por lugares donde antiguas civilizaciones dejaron su huella, conocer lo que hicieron, como lo hicieron, e intentar adivinar porqué.

Experimentar el modo de vida de otras culturas, explorar sus comidas y sus costumbres.

¿Qué te gusta a vos?

Quizá te gusta otro tipo de cosas. Cada uno busca algo diferente.

Por eso tenés que viajar y descubrir el mundo en primera persona.

Te lo puedo contar, te puedo mostrar fotos y videos de los lugares que he visitado. Si fuera un poeta hasta podría escribir un poema intentando trasmitirte emociones, pero la única forma de conocer un lugar es estar ahí. Vivirlo.

Puedo intentar describir lo que sentí al ver por primera vez una Sequoia gigante, un árbol de más de 3000 años de edad que nació cuando Ramsés II reinaba en Egipto, que ya tenía más de 2500 años cuando Colón descubrió América, y que sigue allí brindando su sombra a los visitantes, pero no puedo trasmitir esa experiencia. Tenés que estar ahí.

Puedo intentar contarte qué sentí cuando, caminando por Pompeya, vi los restos de caños de hierro idénticos a los actuales que llevaban agua a una casa que terminó enterrada bajo 20 metros de cenizas volcánicas en el año 79 D.C. Pero tenés que estar ahí y descubrir por vos ese pequeño detalle que te dispare las emociones, o la fantasía.

Alvaro